La diabetes, tabaquismo, hipertensión arterial, sedentarismo, dislipidemia, obesidad y sobrepeso, son factores de riesgos que pueden derivar en el diagnóstico o padecimiento de un infarto al miocardio o de una enfermedad hipertensiva.

Estas patologías cardiovasculares corresponden a la principal causa de mortalidad en Chile y en el mundo, representando cerca de un tercio de todas las muertes a nivel país. De acuerdo con cifras entregadas por el Ministerio de Salud (Minsal), a nivel nacional fallecen 34 personas por cada 100.000 habitantes por un infarto agudo al miocardio. Caso muy similar es el que ocurre con las patologías hipertensivas, donde 31 personas por cada 100.000 habitantes mueren a causa de esta enfermedad.

Al respecto, Javier Segura, Enfermero Coordinador del Policlínico de ESACHS en Proyecto Mapa Horcones, y quien además ha participacido en un sinfín de actividades que involucran la promoción de una vida y alimentación saludable, nos habla de las conductas que originan estos factores de riesgos: “El no adoptar estilos de vida saludable como la actividad física, caminar, comer en forma saludable o practicar algún deporte así como mantener la adherencia a los tratamientos específicos de control o el tratamiento de patologías cardiovasculares, es decir, un chequeo preventivo al menos una vez al año o la revisión médica periódica, puede ser causante de una enfermedad crónica o grave al corazón”.

Asimismo, nuestro Enfermero agrega que “si tenemos algún factor de riesgo o sí se registran síntomas de un infarto o ataque al corazón -como se conoce comúnmente- no hay que dudar en consultar rápidamente a un servicio de urgencia. Estos síntomas pueden ser dolor al pecho, brazo, espalda o, incluso, dolor a la mandíbula. Cada minuto que pasa es vital para el corazón”.

Muchos son los motivos por los cuales debes cuidar tu corazón, pero, principalmente, debes priorizar tu bienestar y el de tu familia. Siempre ten en cuenta y practica los siguientes consejos elaborados por nuestro personal de Salud: 

• Alimentación: Es esencial mantener una buena nutrición para tener un corazón saludable. Una de las mejores maneras de hacerlo es aumentar el consumo de frutas y verduras en tu dieta.
• Descanso: Tu corazón necesita que duermas entre 7 u 8 horas diarias.
• Actividad física: Practicar alguna actividad física de forma habitual contribuirá a mejorar la circulación y disminuir la presencia de colesterol en el organismo.
• Recreación: Es muy importante que te dediques un tiempo libre o te diviertas con alguna actividad, con el objetivo de mantener tu mente sana y libre de estrés.
• Presión arterial: Es necesario que controles tu presión arterial periódicamente, ya que una tensión arterial elevada puede provocar la aparición de enfermedades coronarias.
• Revisión: Para evitar la aparición de enfermedades cardíacas, realice una vez al año un chequeo médico.
• Te recomendamos dejar de fumar y beber alcohol: Es necesario moderar o eliminar por completo el consumo de cigarrillos y alcohol, puesto que ambos elementos son nocivos para el funcionamiento de tu corazón y de todo tu organismo.